jueves, 25 de marzo de 2010

Oidicius

Las gotas de sangre ascendian como babosas por el empapelado floreado. Nacían en hileras reptantes desde el sócalo de madera en el que se escondían, para unirse a la gran mancha carmesí de la pared...que cobraba una consistencia mas y mas líquida.
El aire viciado de un olor ácido y oxidado se depuraba poco a poco, las moscas disminuyeron en número y los gusanos del orificio en mi cabeza se encogieron hasta desaparecer en huevos. Mi cuerpo inerte fue cobrando color.
Levanté instintivamente mi brazo derecho con el arma en mano, apunté a l orificio de mi cabeza y apreté el gatillo.
La bala salío proyectada hacia mi cabeza desde la pared, arrastrando consigo la mancha. Los trozos de mi cráneo volvieron a su lugar y el proyectil me atravesó cerrando su paso hasta terminar en la recámara del revolver.
Aparté el arma de mi sien y la solté como si estuviera ardiendo. Abri los ojos nuevamente y sequé mis lágrimas. La carta que yacía en mis pies careció de sentido. Fue lo unico que no recobró sentido para mi.

martes, 23 de marzo de 2010

Estandarte

Romperemos los moldes, nunca nos podrán copiar. Las estrellas lloraran furiosas nuestras muertes... se narraran dos mil veces nuestras vidas en relatos poco fiables.
Olvidaremos las pequeñas bondades de los dioses, nos vengaremos de sus traiciones, de sus juegos con la humanidad.
Somos los hijos no deseados de La Tierra. Somos los últimos herederos de la furia de Caín. Superemos el dolor lacerante de cada inspiración con un resoplido violento. Gritaremos hacia el cielo, desnudos bajo una lluvia helada y crearemos fuego con nuestras miradas.
No nos compararemos con el pasado ni proyectaremos futuros utópicos. Transformaremos el presente en un instante eterno. Los árboles y las montañas contemplaran esto por vez primera.
Nuestra gloria será irrepetible. Porque romperemos los moldes.

viernes, 19 de marzo de 2010

El Insomnio

Estado vegetativo entre la realidad y el surrealismo. Lenta agonía de la conciencia, amarga soledad de quien estando cansado, no encuentra consuelo siquiera en su almohada.
Horas perdidas mirando un punto imaginario y borroso en un techo invisible, siempre presente a una distancia indefinida por las oscuridad.
Pensamientos vagos, ideas incongruentes, imágenes caóticas que forman secuencias alucinógenas sobre nuestros ojos o se proyectan debajo de los parpados.
Surgimiento continuo de falsas necesidades: falsa sed, falsa hambre....todo por no poder cumplir con el sueño que demandan el cuerpo, la mente y el espíritu.
Agotamiento extremo, dolor punzante mientras que por la ventana se asoman los primeros rayos de un sol frío y acosador.

Sigues escondida

En la braza ardiente, en un cigarrillo recién prendido, en la alegría de un fogón compartido...estas tu. Sin embargo no te veo...
En la fragancia de la lavanda, en el humo de un leño de pino, en el aire después de que llueve sobre el mar...estas tu. Sin embargo no te huelo...
Cuando los grillos entonan sus melodías de verano, cuando las olas gimen excitadas mientras abrazan a las costas, en la risa de un niño estas tu. Sin embargo no te oigo...
Donde los pétalos de flores silvestres gotean el rocío de la mañana, en las caricias, los besos, cuando uno se libera de las presiones y obligaciones cotidianas y puede disfrutar de las pequeñas cosas... y se siente como caminando descalzo y sintiendo en los dedos la suave sensación de un pañuelo de seda....estas tu. Sin embargo no puedo acariciarte.
Quien esté saboreando una comida sazonada con cariño, quien sonría alegre y sinceramente a quien le habla, quien comparta un mate con un ser al que aprecie...te tendrá a su lado. Y sin embargo...no te beso.
Sigues escondida, esquivándome (o esquivándote) en las sombras de mi subconsciente realidad. Porque todo el mundo le teme a la oscuridad de lo desconocido. O quizás estés en las antípodas...no se. Se donde buscarte y no te encuentro. Por favor, espérame.

La realidad

El maestro dijo:
-La belleza de ciertas cosas intangibles es la superior de todas las bellezas.
-¿Como se comprende el concepto de belleza de algo que no se percibe con ninguno de los cinco sentidos?-preguntó el discipulo
-En esta pregunta encontramos la puerta hacia otra realidad...

jueves, 18 de marzo de 2010

Flores de cristal

Flores de cristal que surgen de la arena y el relampago, de formas tan caprichosas como hermosas. Fusiones ridiculas entre lo orgánico y lo mineral, de almas infinitas pero mortales. Aces de luz multifacetica, brindando tanto belleza como las mas lascerantes astillas. Memorias eternas de segundos, la efimiridad de lo eterno corporizado, alma de diamante que se convierte en carbon ante el calor de la pasion.

Del dueño de su destino y del dueño de ninguno

Corrió desesperado. Cruzó la calle sin mirar. Parecía no importarle si lo chocasen o no, pero en realidad sabia que no iba a suceder tal cosa por mas que los autos lo rozasen a escasos centímetros. Empujo una anciana, esquivo una bicicleta, salto una bolsa de residuos… Y por llegó a mi casa. Pateó la puerta a pesar de saber que se encontraba sin cerrojo, subió los escaleras de a dos y de a tres escalones por vez y entro precipitado a mi habitación donde me encontraba escribiendo. Si, escribiendo todo esto que acabo de relatar…
Para mi asombro comenzó a reírse, con una risa grave que hacia eco en lo mas hondo de mi cerebro…como alguna especie de tambor japonés. Cuando comenzó a apaciguarse le pregunte mientras seguia escribiendo “¿No tienes miedo de saber ahora que tu vida está siendo controlada por alguien?¿De que este juego unamuniano se repite contigo y que no eres dueño de tus actos?”

Me seguí riendo durante largo rato, luego de semejante pregunta. No se me acababa el aire de los pulmones de reírme, simplemente porque yo no quería que se me acabase. Tampoco estaba agotado tras las actividad física que había tenido minutos antes. Y el pobre idiota no podía dejar de escribir lo que yo hacia. Era rubio, de esos que tienen el pelo casi blanco y las pestañas claras. La incipiente calvicie contrasta con su aniñado rostro plagado de pecas. Llevaba anteojos de marco dorado y una cadena de metal, flaco, de rostro enjuto, muy poco vello facial, camisa blanca de mangas cortas, corbata sobria, encorvado sobre su escritorio en un cuartucho caluroso en el que no funcionaba el aire acondicionado
.
Mi mano estaba encadenada a la pluma, no podía dejar de escribir…por mas que no estuviese mirando la hoja las letras se deslizaban prolijamente sobre los renglones. Me encontraba hipnotizado por esa satánica sonrisa. Que hijo de mil puta…
-Hey!! Pedazo de nardo deforme!! Ojo con lo que decís conchudo-dijo de repente
-Pero si no dije nada! Es mas, no contes…
-Y eso de “hijo de mil puta”??
No entendía nada…¿Acaso yo no era su creador?¿Como podía ÉL leerme la mente a MI? En segundos lo solucioné: el era parte de mi mente y de mi imaginación. Por ende, el leía cualquier cosa que pasara por mi cabeza. Leía porque no era mas que eso, un personaje literario, un conjunto de letras dispuestas de forma tal que describían su personalidad y sus acciones. No tenia otra forma de comprenderme. Lo que no terminaba de comprender era por qué mierda no podía dejar de escribir. Era algo más que una racha de inspiración…

Me encantó hacerlo divagar. Por lo menos el tipo que escribe mi vida tiene algo de creatividad. Luego de unos minutos en los que me mantuve mirándolo fijamente y con los brazos cruzados, observándolo divertido y disfrutando de su perplejidad le dije:
-Mira…la cosa es simple. Vos escribís mi vida, ¿no?
-Si, sos un personaje de mi invención y…
-ERROR!!! Vos mismo dedujiste solito que yo se todo de vos por estar en tu cerebro.

-Exacto-le dije sorprendido de nuevo ante el hecho de que supiera todo lo que pensaba. Y no podía dejar de escribir mientras le hablaba…y lo observaba…
-Bueno, te toca a cos buscar afuera de tu mente, entrá en la mía-me indico con toda naturalidad, mientras se llevaba el dedo índice a la sien.
Cerré los ojos sin dejar por ellos de seguir escribiendo sobre mis hojas rayadas y me esforcé por lograr lo que me pedía. Tenía terror de llevarle la contra, no sabia por que. Me costó muchísimo esfuerzo romper la barrera de mi mente y ni siquiera dentro de ella me encontraba libre de él, lo cual demostraba que este….ser inventado seguía leyendo la mía con toda naturalidad. Pero al fin, me cruce con una imagen mia escribiendo en mi habitación y me veía desde la posición en la que se encontraba él. Me di cuenta al instante que esa imagen, entre miles, pertenecía a él. Era la única que no estaba en mi cabeza sino que era leída de una mente ajena…
-¿Qué quiere decir esto?

Lo admito. A veces es un pelotudo, pero el tipo sabe hacer escribir historias. Le dije:
-Te doy treinta segundos-mientras miraba mi reloj (había llevado reloj yo?)
No pude evitar una risa corta y tentada, como de velorio…

Los primeros segundos estuve en blanco como nunca antes lo había estado en mi vida. Cuando gritó “Te quedan veinte” me invadió el pánico, no sabia por que le tenia tanto miedo. Sus imágenes…su vida…
-Diez segundos…
Mi vida…escribir…destino…creador…

Me volví a cagar de risa en su cara, esta vez tuve que agarrarme el estomago de lo fuerte que me ataco la carcajada. Me encantaba boludearlo así ¿Qué queres? Si se puso mas pálido que el talco mientras su mano seguía escribiendo. La imagen era graciosísima. Por fin había caído.
-Entonces…quiere decir…vos me inventaste a mi..
-Exactamente-le contesté mientras encendía un pucho (había comprado puchos yo?)
-Pero.. ¿Cómo?¿Para que?-preguntó casi lloriqueando
-Mira. Decirte “porque se me cantaron las pelotas” me da un toque de lastima. Jugar diciéndote “¿Y para que me inventaste vos?” seria medio de hijo de puta. El tema es asi: para todo hombre la idea de jugar a ser dios es divertidísima, es algo que aprenden los pendejos con sus soldaditos de plastico desde que entran en uso de razon.
Mas adelante aprenden a jugar a ser amos y señores de todos sus subordinados alterando sus vidas, haciendo acatar sus ordenes y alterando constantemente los destinos de estos últimos. Pero el único que puede lograr esto de una manera concluyente es el escritor. Unamuno, a quien nombraste hoy, jugó a ser el dios de sus personajes, cambiando sus destinos y acciones a su gusto y llegando a encontrarse y enfrentarse con uno de ellos, tal como te parecía a vos que sucedía cuando llegue yo.
Para mi gusto, es mucha la responsabilidad de ser un dios, dominar la vida de los demás, crear gente. Además seria poco beneficioso, salvo porque permite descargar ciertas frustraciones con tu personaje y satisfacer tu sadismo con él.. -lo mire con malicia, él tembló como una hoja y volví a cagarme de risa.
Quedate tranquilo: por suerte o por desgracia me servís muchísimo mas si te mantengo vivo. Toda esa problemática que te plantee logre resolverla no convirtiendome yo en creador sino construyendo mi propio creador a mi gusto. Ahora soy el dueño de mi destino, porque lo que yo pienso vos lo escribís y se cumple. Tengo mi propio dios, fundido con lo que tenia a mano y construido por mi mismo como el becerro de oro al pie del Sinaí. Tengo un dios que quise crear débil, pero complaciente y creativo. Miedoso de mi y de mis decisiones, pero obediente a todas ellas. ¡Soy el antiunamuno! Soy mas grande que los dioses porque ni ellos son capaces de ir en contra del destino ni cambiarlo!! Yo si!!!

Se rió con su risa de trueno nuevamente. Pero esta vez la acompañaban los relámpagos que se reflejaban por la venta. No se si lo hizo para aumentarle dramatismo a su relato y generarme mayor temor de él, o porque estaba sofocado y quería que la lluvia refresque el ambiente.
En realidad si sé, pero ya no importa. Logró ambas cosas. Cuando cesa su risa afuera llueve a cantaros, se nubla completamente el cielo y la luz se corta. Su rostro grave se ilumina con los relámpagos y apaga lo que queda de su cigarrillo sobre la interminable hoja en la que escribo sin parar. Se va, me deja completamente solo. Lloro como una niña con mis ojos hundidos en mi brazo izquierdo mientras mi mano derecha sigue escribiendo a toda marcha.

Bajo las escaleras saltando mientras tarareo “Stairway to Heaven”. Salgo a la calle, la lluvia me moja poco y no arruina mi campera de cuero. Entro a mi Mustang gris ( llegue en un mustang yo? cuándo lo compré?) prendo el stereo y en la radio pasan un especial de zeppelín. Voy a empezar la noche comiendo en un restaurant. Se que lo voy a pasar muy bien.

Araña reina

Me miraste con tus grandes ojos, como sobresaliendo de una superficie, y supe que era tu presa: un insignificante insecto con el que saciar tu apetito. Te observé detenidamente, como queriendo disimular mi miedo y mi admiración. Luego de varios intentos, me permitiste probar tus tóxicos labios. Padecí de esa sensación subjetiva que es propia de las noches en las que se bebe y se fuma de más, y sin embargo uno se mantiene lúcido.
De ninguna manera podría llamar a eso amorpero no era meramente atracción sexual. Era más bien algo parecido a la hipnosis. Ahora me das de tu veneno muy de vez en cuando y yo, como toda persona que insiste en un vicio, hago lo imposible para obtenerlo.

Fin

(...) Y la Muerte, cuando ya había reclamado todas las almas en el fin de los tiempos, ya agobiada por la culpa y por su agotado corazón, intentó suicidarse con su propia guadaña sabiendo que, paradójicamente, no era dueña de su vida.
Y allí quedó, sola en un mundo devastado, condenada a agonizar y a continuar con su crudo labor luego de que el Eterno realizase la Nueva Creación.
Fin

Empezando con esto...

Mi nombre es Diego, nacido y criado mi bellísima y bien amada ciudad de La Plata, Argentina. Tengo 25 años y estudio Diseño en Comunicación Visual, y soy un enamorado de las letras (tipográfica y literalmente). Si mucha mas presentación que esta... perdón por los pecados a cometer y disfruten su visita.